Rotavirus: Tucumán realizó una campaña de vacunación a principios de año
Luego de la muerte de cinco bebés a causa del “rotavirus”, ocurrido en el último mes en la zona oeste del Gran Buenos Aires causó cierta preocupación general, las autoridades de Salud de la Provincia aclararon que en Tucumán ya se realizó una campaña de vacunación meses atrás.
En ese sentido, el propio ministro de Salud Pública, doctor Pablo Yedlin, aseguró que desde diciembre de 2013 hasta abril pasado “se realizó una campaña de vacunación”. Este fue un anticipo a la incorporación de ésta vacuna al calendario Nacional de Vacunación desde el 2015. En ése período de tiempo se colocaron 15 mil dosis.
Ante esta situación ocurrida en Buenos Aires, el doctor Yedlin solicitó a la población que “en caso de presentarse deposiciones más frecuentes y no habituales, hay que concurrir de inmediato al médico para evitar complicaciones”.
En torno al rotavirus, el ministro aseguró que “no tenemos mucha circulación y atravesamos un invierno bastante tranquilo en cuanto a las diarreas”. Según Yedlin la campaña que se realizó a principio de año influyó bastante. “Tucumán recibió de la Nación 15 mil dosis y las tres dosis obligatorias se las aplicaron a 4.275 niños.
¿Qué es el rotavirus?
Este virus produce una infección intestinal (o gastroenteritis) que es la causa más común de diarrea severa en niños, especialmente entre los 6 meses y 5 años de vida. En los casos más graves, la deshidratación generada puede llegar a ser mortal. Los adultos también pueden infectarse, aunque la enfermedad tiende a ser leve.
¿Cómo se transmite?
El rotavirus puede sobrevivir durante varias horas en las manos, y durante días en superficies sólidas como mesadas, pasamanos, utensilios, etc. La principal vía de contagio es la fecal-oral, por lo que puede ser:
– De persona a persona: Esto ocurre cuando una persona sana toca partículas de materia fecal de una persona infectada con el virus, y sin darse cuenta las introduce en su boca (por ejemplo, por no lavarse las manos adecuadamente).
– Consumo de agua o alimentos contaminados con el virus. Contacto con superficies en las que perdura el virus (un pañal, un juguete, ropa de cama, etc).
¿Cuáles son sus síntomas?
Se manifiesta como una gastroenteritis de 3 a 8 días de duración, con:
– Vómitos explosivos.
– Diarrea acuosa a repetición (hasta 20 deposiciones por día).
– Fiebre.
– Dolor abdominal.
El mayor peligro es la deshidratación, la que puede llegar a provocar la muerte, en especial en los bebés y niños pequeños. Por eso, ante la presencia de estos síntomas es importante acudir al médico rápidamente a un centro de salud.
Si el niño no tolera el tratamiento de hidratación oral (por vómitos) puede ser internado para recibir hidratación por vía endovenosa.
¿Cómo se puede prevenir?
Tomar medidas de cuidado e higiene ambiental que incluyan todos los utensilios y también los alimentos:
– Lavarse las manos con agua y jabón, en especial después de ir al baño y/o cambiar pañales, y antes de comer.
– Consumir agua segura.
– Mantener la lactancia materna durante el primer año de vida de los bebés.
Frente a cuadros de gastroenteritis (diarrea y/o vómitos) se recomienda aumentar la frecuencia de la lactancia. Y que los niños con diarrea no asistan a la guardería o jardín maternal, a fin de evitar el contagio hacia otros niños.