Salud y el CONICET avanzan en líneas de acción conjuntas para la prevención y diagnóstico del Dengue
El ministro de Salud Pública, doctor Luis Medina Ruiz, se reunió en la mañana de este viernes con el director del Centro Científico Tecnológico (CCT) CONICET NOA Sur, Doctor Augusto Bellomio, y equipos de investigación de ambas instituciones para analizar avances en líneas de trabajo en materia de prevención del dengue y otras patologías emergentes.
En este contexto el ministro Luis Medina Ruiz destacó la importancia del encuentro con referentes del CCT y del Instituto Superior de Investigaciones Biológicas (INSIBIO) del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET) para avanzar de forma continua en la prevención del dengue, de cualquier enfermedad emergente transmitida por vectores, así como de patologías crónicas, entre otras tantas que puedan investigarse.
“Investigación y Salud tienen una sociedad muy fuerte, vemos todos los días cuando emerge algún problema de salud que hay una parte de la ciencia y de investigación que apoya fuertemente la toma de decisiones, a veces hay ya estrategias, antecedentes y evidencias, pero hay otros casos, como el Covid, en el que no había una evidencia escrita porque se trataba de una epidemia nueva. Hoy se generó una sociedad nueva, vamos a trabajar en el futuro muy fuerte colaborando entre nosotros -medicina asistencial y de investigación-, creemos que esto es algo muy positivo”, afirmó el titular de la cartera sanitaria. |
Por su parte el director del CCT CONICET NOA Sur, Doctor Augusto Bellomio, destacó el interés que ha manifestado el ministro de conocer en la oportunidad todos los proyectos que investigadoras de Tucumán llevan adelante relacionados con dengue, la detección del mosquito transmisor y el control de la oviposición -dónde pone los huevos el Aedes Aegypti-, así como los trabajos con un bio-larvicida, basados en una bacteria que afecta el crecimiento de las larvas del mosquito.
“Se va a presentar un proyecto federal de innovación para estudiar todos estos mecanismos que podemos tener disponibles para actuar contra la transmisión y la enfermedad del dengue. Es un trabajo muy importante teniendo en cuenta cómo se ha presentado el dengue en esta última etapa en la provincia, que podamos hacer estos avances desde el CCT CONICET NOA Sur y la Universidad Nacional de Tucumán”, manifestó Bellomio a la vez que resaltó la participación de los investigadores del CONICET en el encuentro, así como de la UNT y de la Estación Experimental Agroindustrial Obispo Colombres a través del Instituto de Tecnología Agroindustrial del Noroeste Argentino ITA-NOA.
Los proyectos, caracterizó Bellomio, son plenamente interinstitucionales, multidisciplinarios y coordinados de la manera adecuada, para que puedan dar sus frutos y aporten a la salud pública en Tucumán y el NOA: “Actualmente las investigadoras trabajan con las trampas de oviposición, labor que desarrollan en forma conjunta con el Ministerio desde hace varios años, controlando la presencia del mosquito Aedes y también en diferentes estrategias en conjunto con investigadoras que trabajan también en las ciencias sociales y en zonas vulnerables de la ciudad y de la provincia”.
Siguiendo esta línea el directivo enfatizó que se acordaron además con el ministro futuras colaboraciones en diferentes temas que pudieran surgir para brindar el conocimiento de las investigaciones que se están llevando a cabo actualmente en muchos centros. El CCT NOA Sur tiene 23 unidades ejecutoras que trabajan en múltiples temas, muchos de ellos relacionados con salud, lo cual garantiza la continuidad de la labor articulada con el Ministerio en el futuro.
Por su parte la investigadora del CONICET, Doctora Guadalupe Vizoso, se refirió a un proyecto de redes federales de alto impacto, que cuenta con la cooperación de grupos de La Plata, Buenos Aires y Tucumán, para abordar distintas infecciones virales y mejorar el diagnóstico: “Se trata de una tecnología muy novedosa en donde se utilizan nano poros, que son poros muy pequeñitos a los que se les adaptan moléculas altamente sensibles que reconocen al virus, por ejemplo el dengue o la hepatitis, y con ello lo que se hace es un dispositivo muy pequeño, portátil y rápido que permite la detección del virus de manera prácticamente instantánea”.
“Uno puede tomar una muestra de saliva y se puede detectar el virus en el momento en que se está replicando en el paciente. También se puede detectar en sangre e incluso podemos detectarlo en el medio ambiente, por ejemplo, en los mosquitos, y de esa manera determinar los focos en donde se está multiplicando el virus en ciertos grupos de mosquitos”, detalló Vizoso respecto a la investigación que se encuentra avanzada y agregó que la idea de este test es que también permita diferenciar los serotipos y que después sea aplicable a otras infecciones.
En este sentido la referente hizo hincapié en la importancia del apoyo del ministerio, que definió como fundamental ya que este tipo de avances tienen un impacto profundo en la salud pública: “Con el aval del ministro y el interés que demuestra tiene en este desarrollo, nos sentimos muy apoyados y de esta manera podemos llegar al destino final que es el paciente, la población y la salud pública”.
La directora de Investigación del Siprosa, doctora María Peral de Bruno, sostuvo que se espera de este tipo de encuentros abarcativos surjan compañías de colaboración específicas con los investigadores del sistema también: “Tienen mucho bagaje, mucha experiencia, mucha expertise en el tema y pueden ayudar quizás a prevenir de alguna manera lo que pueda pasar en 2024 con este vector. Hablamos mucho del sistema de alerta temprano, de la necesidad de no esperar que el foco se encienda, sino de ir tempranamente a prevenir en aquellas zonas en las que puede tener mayor impacto esta patología”.