Se concretó el séptimo trasplante de médula en el Hospital Néstor Kirchner
El mismo estuvo a cargo de la Unidad de Trasplante de Células Progenitoras Hematopoyéticas del efector y se realizó en un paciente con una tumoración sólida. Con la misma se busca que pueda alcanzar la remisión de su enfermedad y sostenerla la mayor cantidad de tiempo posible.
Sobre esto, el doctor Luis Medina Ruíz, dijo que este séptimo trasplante refleja el compromiso del sistema de Salud, que, a pesar de la situación epidemiológica, continúa dando respuesta a pacientes con enfermedades hematoncológica u oncológicas que requieren esta clase de intervenciones de alta complejidad. “Se ha dado de alta ya al séptimo paciente con esta intervención que es un trasplante de médula ósea. Este es un Centro es Regional, es decir que recibe a pacientes de todo el NOA”.
Y añadió: “Todo esto se logra gracias a una tecnología de alta complejidad disponible para todos los tucumanos y la región norte. Es importante destacar que también todo el profesional se encuentra altamente capacitado para poder llevar a cabo esto, ya que no sería posible incluso teniendo la tecnología, si no tuviésemos el recurso humano, ellos se han capacitado en Buenos Aires y otros países. Para realizar este tipo de intervención se debe estar aprobado por la por el INCUCAI y para eso necesita una capacitación de muchos años y eso lo tenemos en Tucumán”.
La médica hematóloga de la Unidad de Trasplante de Células Progenitoras Hematopoyéticas del Hospital Néstor Kirchner, doctora María Pagani, comentó que el paciente que se encuentra internado en la unidad actualmente, es el séptimo trasplantado desde la creación del servicio: “Él tenía una indicación de trasplante por una tumoración sólida, que no es la usual de un paciente de hematología, pero fue derivado por los oncólogos y esto también va generando experiencia en diferentes patologías, que tienen indicación de trasplante autólogo”.
La intervención busca que el paciente pueda alcanzar la remisión de su enfermedad y sostenerla la mayor cantidad de tiempo posible: “Usar un trasplante en una tumoración sólida es algo que no se da eventualmente y en él será el tratamiento que permite las altas dosis de quimioterapia y después con su propia médula ósea que se infunde -ya que hablamos de un trasplante autólogo- el paciente se va a beneficiar logrando una recuperación más pronta”.
Sobre esta línea, la especialista aclaró que un trasplante de médula ósea no es una cirugía en sí, sino que consiste en la infusión de las células que se recolectaron previo al inicio de la quimioterapia y la infusión posterior del trasplante: “El paciente cursa un periodo que llamamos aplasia post quimioterapia, en el cual sus defensas y plaquetas bajan y debe estar muy bien cuidado, por eso está internado en la unidad de trasplante con todas las condiciones características que tienen las unidades de trasplante, que son especiales para este tipo de pacientes”.
Una vez que pasa ese tiempo de aplasia, continuó Pagani, es cuando la médula empieza a recuperar sus valores e inicia la recuperación post trasplante. Por lo general la unidad recibe por derivación a pacientes con patologías onco hematológicas, con criterio de trasplante autólogo: “Una vez que se establece, mediando plena comunicación con el médico de cabecera, se inicia el proceso de evaluación pre trasplante, que es la etapa previa a la internación y a realizar el trasplante propiamente dicho”.
A su vez, la doctora Anahí Gómez, médica del departamento del Departamento de Hemato-Oncología del hospital Néstor Kirchner explicó que el efector cuenta con una unidad de trasplante de células progenitoras hematopoyéticas en el segundo piso de la institución. “Se trata de un trasplante que se llama autólogo de médula ósea o progenitoras hematopoyéticas dentro de una patología asociada a una enfermedad oncológica como es la miloidosis. El realizó los pasos necesarios de recolección de células, el acondicionamiento y posterior trasplante; por fortuna pudo egresar de la internación con muy buena evolución”.
El equipo de la Unidad es amplio y multidisciplinario, la doctora Flavia Figueroa está a cargo del Departamento de Hemato-Oncología y de la Unidad de Trasplante y con la doctora Pagani suman 7 hematólogas, además de médicos clínicos, infectólogos, terapistas, equipo de enfermería especializada en patología hemato-oncológica y en trasplante, kinesiólogos, psico-oncólogos y personal de laboratorio que trabaja en todas las áreas y hacen seguimiento de la evolución diaria de los pacientes.