Se inauguró la Escuela de Pacientes en el hospital de San Pablo
Durante la jornada el ministro de Salud Pública, doctor Luis Medina Ruiz, dio inició a este nuevo espacio ubicado en el aula de diabetes y que está destinado a pacientes con esta patología, con el objetivo de que los mismos puedan aprender y compartir experiencias con sus pares y profesionales.
“Estamos contentos porque este hospital es muy receptivo y cuando se les ofreció la idea aceptaron y en poco tiempo tienen los pacientes. Semanalmente recibirán instrucciones de cómo hacer actividad física, cómo alimentarse, el control de sus pies, el cuidado de su medicación, es decir, qué es lo que se debe hacer y qué no para llevar bien la enfermedad”, explicó Medina Ruiz.
En la oportunidad, el funcionario indicó que ya cuenta con los tutores, que son los propios pacientes que contendrán a los otros pacientes. Destacó que la idea principal es compartir este espacio con una actitud positiva. Además, durante su recorrido destacó los servicios con los que cuenta el hospital: “Está todo muy ordenado, limpio y con un personal que tiene muchas ganas de trabajar y con mucha empatía hacia los pacientes. Es un lugar donde la población cercana recibe una buena atención”.
Por su parte, la directora del hospital de San Pablo, doctora Alicia Astete Agote, contó que esta escuela responde a una demanda importante de pacientes. “Contamos con una profesora de educación física, una nutricionista, endocrinólogos, clínicos y la farmacia de crónica. Pudimos hacer muchas mejoras en la parte edilicia, insumos, aparatología y mejoras en los servicios gracias al apoyo del ministro de Salud”, remarcó.
Testimonios
Nélida Muruaga explicó que es una de las primeras pacientes que empezó, desde hace más de 10 años, y que a causa de la pandemia sus actividades se suspendieron. “Dejé de controlarme y de venir, por lo que sentí que me abandoné. No salía y no tenía contacto ni con mis compañeras, ni con los médicos y ahora estoy contenta de que volvimos a empezar; y además tenemos la posibilidad de hacer actividad física todos los días”, manifestó.
Por su parte, María Cristina contó que comenzó con el taller gracias a su hermana que le advirtió que podía tener esta patología, ya que su madre la tenía. “Ella me trajo en 2015 y me salía que tenía, pero en un grado bajo, y desde ahí me explicaron cómo debe ser mi alimentación y la importancia de la actividad física, por lo que es muy bueno poder contar con estas clases”, remarcó.
Por último, Alberto Oli indicó que el hospital cuenta además con talleres de cocina, actividad física y otros más; y destacó que es muy importante contar con estos talleres ya que son muchos los que padecen esta patología y no conocen cómo llevar una vida normal, por lo que recomendó que todos los que puedan se sumen a estos talleres.
