Servicios Intermedios del hospital Kirchner, un área fundamental en la higiene sanitaria
El departamento cuenta con unidades que son de apoyo para el quirófano, hemato oncología y odontología. Dentro del mismo se encuentra el servicio general y mantenimiento, que está formado por un jefe de unidad, un técnico en seguridad e higiene, un jefe biomédico y un agente.
Al respecto, Celina García, jefa de Servicios Intermedios de la institución, cuenta: “El departamento cuenta con distintas unidades importantes; una de éstas es servicios generales y mantenimiento. La tarea de ellos es muy amplia, no sólo de nuestro hospital sino también del Laboratorio de Salud Pública, ubicado del cuarto al sexto piso. La unidad está encargada de la infraestructura de nuestro hospital, tanto en mantenimiento preventivo como correctivo. Control de canaletas, tanques de agua, mampostería, entre otras tareas”.
Y sostiene que, a diferencia de otros efectores, en este hospital trabajan con procesos: “Todas las tareas están documentadas y comunicadas a todos los empleados. Una de las cosas que nos ayudó bastante es que certificamos normas ISO, justamente esta semana estamos por recertificar, y el mes que viene vamos a acreditar. Esto facilita la tarea, permite un orden y sobre todo lograr un objetivo en tiempo y forma”.
Por su parte, el jefe de Servicios Generales y Mantenimiento, ingeniero Francisco Alejandro Mender, explica el funcionamiento del lavadero del efector, un área vital para la higiene y seguridad.
La ropa llega del quirófano, odontología, enfermería y hemato oncología. Ingresa al lavadero embolsada, rotulada, y se la clasifica en un área de recepción donde la ropa se registra y se pesa para luego ser lavada. Las maquinas tienen una capacidad de hasta 15 kilos de ropa seca por lavado; el tiempo de lavado es de 45 minutos.
“Primeramente se busca la desinfección de la ropa de manera que llegue estéril al paciente. Es decir, eliminar cualquier probabilidad de contaminación. Se utiliza agua a temperatura de 70 grados centígrados, pero debido a los productos que se utiliza como potenciador de jabón, se logra desinfectar la ropa. Aparte el proceso mismo está dividido en etapas que garantizan que esta ropa llegue descontaminada al lugar donde se la demanda. Por ejemplo después de la lavadora, tenemos una centrifugadora donde se revisa el estado de la ropa, y en el caso que necesite un re-lavado se hace de vuelta el proceso. Luego pasa por una secadora a tambor con alta temperatura. Se entrega la ropa en condiciones para ser planchada. Disponemos de una calandra, es una planchadora que trabaja a una temperatura de 140 grados prácticamente donde se puede eliminar cualquier germen que quede. Por último, el personal dobla la ropa, la embolsa y clasifica, lista para ser enviada a los sectores”, finaliza.