Tucumán trabaja para erradicar la transmisión vectorial de la enfermedad
En la oportunidad, el ministro de Salud Pública de la Provincia, Pablo Yedlin, recibió en su despacho a la subdirectora de la Dirección de Enfermedades Transmisibles por Vectores, Silvia Monserrat y a la coordinadora del Programa Nacional de Chagas, Cynthia Spillmann, quienes junto a los equipos locales, compartieron experiencias en la materia.
Al respecto, el titular de la cartera sanitaria local afirmó que el trabajo con la Delegación Federal Nacional en el Control de Vectores, se viene desarrollando a lo largo de varios años y de manera conjunta. El Chagas es una enfermedad transmitida por un insecto, la vinchuca, que habita en viviendas rurales y en las zonas peridomiciliaria (galpones, corrales, entre otros).
“Nuestra misión es erradicar esta enfermedad grave, que hoy tiene tratamiento y que se puede curar, pero que muchas veces tiende a la cronificación, se transmite de madre a hijo y puede generar lesiones irreversibles”, expresó el ministro, en tanto comentó que Tucumán trabaja por la erradicación de la transmisión vectorial-por contacto con la vinchuca- y por la detección a nivel escolar.
En referencia a esta labor, el funcionario sostuvo que se ha mejorado mucho, ya que en varios departamentos de la Provincia se ha demostrado que la transmisión vectorial no existe y que se están redoblando los esfuerzos en departamentos más endémicos como Tafí del Valle, Leales y Graneros.
“Nuestra misión es erradicar esta enfermedad grave, que hoy tiene tratamiento y que se puede curar, pero que muchas veces tiende a la cronificación, se transmite de madre a hijo y puede generar lesiones irreversibles” – Pablo Yedlin-“Esta tarea no se acaba, no se erradica, sino que se controla con la higiene de nuestras casas y zonas circundantes, batalla que tenemos que dar entre todos”, expresó Yedlin. Al tiempo, Spillmann agregó que Tucumán sostiene importantes avances en términos de cobertura, de registro y vigilancia, motivo por el cual 6 de los 9 departamentos más endémicos se encuentran debidamente controlados.
Siguiendo esta línea, Silvia Monserrat destacó como clave la tarea de vigilancia, un proceso complejo y estructural que comprende a toda la sociedad: moradores de las viviendas, referentes del ámbito de la educación, de desarrollo social, de los municipios y que entre otros aspectos contempla la labor de los agentes socio sanitarios.
“Si una vinchuca aparece en un domicilio, luego de la limpieza y el barrido correspondiente, debe desenvolverse todo un proceso casa por casa, en el que Tucumán está involucrado muy seriamente”, definió Monserrat, enfatizando que contar con un centro único de denuncia por localidad, es esencial ante la aparición del insecto.
Por su parte, la jefa del Programa de Control de Enfermedades Transmitidas por Vectores de la Provincia, Antonia Lavenia, manifestó que tanto el control vectorial como el no vectorial se encuentran aceitados y en marcha localmente; y respecto al último comentó que se hace hincapié en el control de la madre embarazada y del niño recién nacido, lo que posibilita la cura del niño casi en un 100 por ciento.
Además se trabaja en el muestreo serológico, un indicador para consolidar a la Provincia como libre de transmisión por vectores, razón por la cual en los departamentos endémicos se testea a niños menores de 5 años y en las escuelas (Burruyacú, Graneros, Leales, Cruz Alta, Simoca, un área central del norte de Tafí del Valle y dos localidades serranas del Departamento de Lules).
Cabe destacar que las nuevas normas de tratamiento de Chagas, extienden la edad de control de la enfermedad crónica hasta los 19 años y de 19 a 50 años, todos tienen a su disponibilidad el diagnóstico y la medicación de forma totalmente gratuita.