Una cirugía inédita en el sur tucumano permitió que una joven no pierda un riñón
La intervención quirúrgica duró aproximadamente tres horas y se realizó en el hospital de Concepción. Sandra (19 años), que padecía de una Estenosis Pieloureteral Congénita, evoluciona favorablemente.
Esta cirugía pudo realizarse gracias a que el efector actualmente cuenta con un nuevo equipo de cuatro urólogos especialistas y la adquisición de un aparto laparoscópico recientemente otorgado por el Ministerio de Salud.
Al respecto la directora del efector, doctora Gilda Gómez, contó: “Para nosotros es una muy buena noticia que como hospital Regional podamos realizar cirugías de mayor complejidad como esta. Es fundamental que los pacientes puedan tener su tratamiento dentro del área en donde viven, además de evitar la derivaciones”.
Esta intervención quirúrgica, hasta ahora nunca se había podido realizar en este hospital, y los pacientes debían ser derivados a efectores centrales. Hoy el hospital regional no solo puede resolver el caso de Sandra, sino que ya tiene programadas dos cirugías de este tipo próximamente.
Los profesionales que trabajaron en esta cirugía fueron: los doctores Alfredo Penida, Walter Del Frari, Fernando Ovejero y Federico Pintor. El Anestesiólogo, doctor Nicolás Romero; e instrumentistas Nancy Soberón y Rosario Arias.
Cabe destacar que la joven de 19 años, desde muy pequeña padecía de esta afección la cual le generaba una dilatación importante del riñón, ya que su producción urinaria no podía ser evacuada normalmente. La patología ‘estenosis pieloureteral congénita’, si bien no es una enfermedad muy frecuente, suele afectar a mujeres de ese rango etario.
Por su parte el jefe del Servicio de Urología del hospital Regional de Concepción, doctor Walter Hugo Del Frari, explicó: “Esta cirugía la realizamos a una joven que por su problema congénito tenía una gran dilatación en el riñón que estaba dejando de funcionar. Lo que hicimos fue restaurar la estenosis por vía laparoscópica colocando un catéter desde el riñón hasta la vejiga, es decir, aplicamos un injerto que permitirá reacondicionar el conducto para que el riñón pueda mandar la orina hacia la vejiga”.
Asimismo el profesional destacó que la recuperación de la paciente será inmediata y podrá ser controlada vía ecografía directamente en consultorio externo. “Lo único que queda es una pequeña incisión por donde ingresamos con el catéter, si bien es una cirugía muy meticulosa ya que requiere recortar y desmembrar la pelvis y el uréter, esperamos que en 24 horas Sandra ya esté recuperándose en su hogar”, finalizó Frari.