Programa Provincial de Atención Integral del Adulto Mayor
Se denomina adultos mayores a toda persona de 60 años y más, para los países en vía de desarrollo, como Argentina y 65 para los países desarrollados. El mundo está envejeciendo rápidamente: para el año 2050 el número de personas de 60 años y más se habrá duplicado, del 11% en el 2006 a 22%. Para entonces, por primera vez en la historia de la humanidad, habrá más personas mayores que niños (de 0–14 años de edad) en la población.
Argentina, como ciertos países en desarrollo, está envejeciendo a un ritmo mucho mayor que los países desarrollados. Este proceso de transición demográfica es el producto de los avances en Salud Pública, las condiciones de vida, de los cambios en las tasas de natalidad y de mortalidad (disminución).
El envejecimiento activo es el proceso de optimizar las oportunidades de salud, participación y seguridad a fin de mejorar la calidad de vida a medida que las personas envejecen. Contar con organizaciones amigables con los adultos mayores sería una estrategia valida dentro de este marco. Dado que el envejecimiento activo es un proceso que dura toda la vida, una ciudad amigable con los mayores es una ciudad para todas las edades.
Para ello, es importante fomentar acciones que propicien dentro de una sociedad organizaciones amigas a los adultos mayores donde imperen los buenos tratos, reconociéndolos como sujetos activos, capaces, con potenciales y habilidades para desarrollar dentro de una comunidad.
Tal como se indicara en la Declaración sobre Envejecimiento de la OMS de Brasilia en 1996, “las personas mayores saludables constituyen un recurso para sus familias, sus comunidades y la economía”.
El Plan Internacional de Acción sobre Envejecimiento realizado en Madrid en el 2002, avalado por las Naciones Unidas, reconoce la necesidad, para lograr el bienestar de los Adultos Mayores, de entornos facilitadores y de apoyo para compensar los cambios propios del envejecimiento.