Personal del hospital de Niños realizó una triple intervención a una nena con coronavirus
La paciente de tan sólo dos años de edad ingresó al efector tucumano con problemas en la vía urinaria. Le diagnosticaron un tumor en la zona abdominal y luego confirmaron tras los estudios prequirúrgicos que la menor era COVID-19 positivo. La cirugía fue exitosa y ahora se encuentra evolucionando favorablemente en la institución.
Ayer se realizó por primera vez en la provincia, una triple intervención en una paciente pediátrica de dos años de edad con confirmación de coronavirus. La niña fue internada en el hospital del Niño Jesús tras diagnosticarle un tumor abdominal importante en volumen que comprometía sus vías urinarias.
“La pequeña quedó internada para realizar más estudios y poder determinar el tipo de tumor del que se trataba y qué más le afectaba. En estos casos tenemos que hacer una estadificación para saber si hay otros órganos comprometidos. Se hacen todos los estudios pertinentes. Para ello, comenzaron a trabajar juntos los servicios de Oncología, Urología y Cirugía. Se determinó que este tumor había que biopsiarlo y cuando nos disponíamos a realizar el último estudio, que era una resonancia fuera del hospital, solicitamos por protocolo el hisopado de COVID-19. Allí nos enteramos que la chiquita era COVID positivo, a pesar de no presentar ninguna sintomatología al respecto”, contó la presidente de la Sociedad de Cirujanos Infantiles de Tucumán y responsable de la Residencia de Cirugía Infantil del hospital, doctora Rosana Estela Bourdette.
Esta confirmación hizo más complejo el caso, porque la nena debía entrar a quirófano para solucionar el problema urinario, hacer una biopsia del tumor y terminar de calificar oncológicamente si la médula ósea estaba comprometida; y todo esto con el virus.
“Cuando supimos que era COVID positivo se la aisló, como así también a todos los médicos que la habían atendido. Se le hizo el estudio a todo el personal que había tenido contacto con la paciente pero ninguno salió positivo. A pesar de que uno no trata con un paciente COVID positivo, igualmente trabajamos con todo el equipo de protección: máscaras, camisolín, guantes, lavado de manos, higiene entre un paciente y otro; y hay una distancia prudencial entre una cama y la otra. Suponemos que por esa razón no hubo mayor contagio”, relató la médica.
A partir de este momento, se organizó una junta médica en la que intervinieron los servicios de Cirugía, Oncología, Urología, Infectología, Imágenes, Patología y Clínica. Los profesionales acordaron la necesidad inminente de una intervención quirúrgica tomando todos los recaudos necesarios tanto para el paciente como para el personal sanitario actuante.
La cirugía se realizó en una unidad quirúrgica preparada especialmente para estos pacientes, separada del resto del quirófano como indica el Protocolo para COVID-19.
La operación fue exitosa y el equipo logró resecar más del 90 por ciento del tumor. Además, se le practicó una cistoscopia y colocación de dos catéteres liberando la vía urinaria.
“La niña salió muy bien, actualmente está en Cuidados Intermedios del sector COVID. Trabajaron tres equipos quirúrgicos y al ser una cirugía de altísimo riesgo no sólo para la paciente sino también para el equipo quirúrgico, haberla podido realizar fue realmente todo un logro. Nuestra mayor recompensa es que ella haya salido bien. Ahora está estable, cumpliendo sus primeras 24 horas de cirugía, acompañada por su mamá y con una mejoría notable”, detalló la especialista.
Desde el punto de vista urinario, destacó que está normal y mejoró su parte abdominal al haber resecado el tumor. Mientras, se esperan los resultados del servicio de Patología para saber de qué tipo de tumor se trata.