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Camarógrafo de Salud recibió el “Premio Luna de Oro” por su destacada labor en los medios de comunicación

La Organización Princesa Alexandra de Buenos Aires creó los premios “Luna de Oro” para homenajear a personalidades del norte argentino que se destacan en los ámbitos del arte, la cultura, los medios de comunicación, radio, tv y terreno digital. En su primera edición, el camarógrafo del Ministerio de Salud Pública, señor Miguel Carrazano, recibió el galardón por sus más de 40 años de trabajo en el campo audiovisual.

Miguel Carrazano nació en Anfama, la familia y el trabajo sacrificado marcaron su vida desde muy joven. Cosechó cañas con su padre hasta 1976, se trasladó al Siambón para trabajar sembrando, cultivando verduras y cuidando un vivero a los 16 años, pero su destino y su carrera cambiarían cuando a sus 18 se mudó a la capital para trabajar allí.

“Mi primer trabajo para la Universidad fue cuando Canal 10 empezó la obra de construcción de la casa para la antena de Villa Nougués, me eligieron para cuidarla. Fue en marzo de 1978, se venía el Mundial en junio y apuraban los trabajos para su transmisión a color”, empieza a relatar los orígenes que derivarían en su profesión.

Luego del Mundial del 78 Miguel permaneció en el puesto de sereno y al cuidado de los equipos del canal en Villa Nougués. Cuando la antena tenía inconvenientes, los técnicos empezaron a confiar en él y a enseñarle de a poco cómo arreglar la transmisión.

“Empezaron a conocerme y cuando terminaron los trabajos ahí me trajeron al canal como ordenanza, trabajaba desde temprano sin pausa ni descanso. A mis 22 años tuve un grave accidente de moto por el que tuvieron que operarme la cabeza, la recuperación fue compleja y cuando volví al canal empecé a desempeñarme como gestor de oficina por las mañanas”, continuó relatando.

Fue en su etapa como gestor cuando entre labores y salidas comenzó a interesarse en la tarea de los camarógrafos. “Comencé a mirar cómo era ese trabajo y me apasionó verlos en acción. Veía como usaban esas cámaras pesadas, me acercaba a ellos, les preguntaba si necesitaban ayuda para algo, consultaba, me sacaba dudas sobre cómo funcionaban y empecé a querer ser parte, casi sin darme cuenta, del mundo de las cámaras”.

En 1983 luego de mucho insistir lo consiguió: su pase al informativo como ayudante de cámara. “Yo quería aprender, pero en ese momento no había una carrera de camarógrafo, así que estudié cursos de fotografía, leí libros con los que adquirí nociones generales, tomé todo lo que podía servirme. Salir a hacer imágenes, la práctica de cada día, esa era nuestra escuela”.

Su primera nota al mando de la cámara fue con un doctor, recuerda Miguel, y desde entonces no dejó de estar detrás de la lente. A fines de 1985 empezó a trabajar para el Siprosa, en esa época salud no tenía un equipo de prensa como el actualmente conformado y el entonces presidente del organismo, doctor Orlando Rossi, pedía al canal la cobertura informativa de algunos eventos, en uno de los cuales el funcionario le propuso trabajar formalmente como camarógrafo del Sistema de Salud.

El entonces incipiente equipo de prensa de salud empezaba a fortalecerse y a tomar estructura. Cambios de gobierno, mayor cantidad de horas de cobertura y protocolización de la labor fueron parte del proceso de crecimiento del Departamento de Comunicación y de la difusión masiva de los avances en la salud de Tucumán.

36 años de trayectoria trabajando para el Siprosa y más de 40 para Canal 10, lo llevaron a cosechar incontables compañeros y amigos. Muy joven conoció al amor de su vida y armó una familia con tres hijos que lo son todo para él.

El trabajo lo llevó a ser testigo de sucesos de todo tipo, trágicos y felices, de enfermedad y recuperación: “Yo aguanto la emoción, cuando me toca cubrir una nota difícil lo hago como si no hubiera sentimientos de por medio. En casa, solo, vuelvo a pensar en lo que vi y muchas veces me emociono, pero con la cámara en mano yo estoy trabajando”, dice Miguel que transformó las ansias de superación y la práctica incansable, en su estandarte y profesión.

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