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Día Mundial de la Salud Mental en el hospital “Nuestra Señora del Carmen”

Bajo un lema que apunta a derribar la estigmatización y la discriminación en materia de problemáticas de salud mental, se realiza una jornada de actividades con la participación de los diferentes servicios del efector.

La directora del hospital, doctora María Cecilia Silván, resaltó que en el marco de la conmemoración del Día de la Salud Mental y bajo las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud, se prioriza el cuidado del bienestar físico, social y psíquico de cada paciente, contrario a viejos paradigmas que consideraban como salud a la ausencia de enfermedad.

“La salud mental es un soporte muy importante para la vida. El hospital del Carmen como uno de los referentes provinciales en la materia se adhiere a este festejo y por eso todo el personal se sumó a la iniciativa”, contó a la vez que destacó la institución se encuentra en un proceso de permanente evolución hacia la polivalencia, esa decir que busca no solo atender las problemáticas que atañen a la salud mental, sino a diversas patologías.

Prestaciones de cardiología, gastroenterología, odontología y nutrición se suman a la labor ya reconocida en psicología y psiquiatría que se desarrolla a diario en el hospital del Carmen. “Tenemos una producción mensual de aproximadamente 4500 consultas. Hoy los stands vienen a reflejar esa labor, con la participación del departamento de Enfermería, Rehabilitación, Fibromialgia y Externación y la realización de actividades lúdicas para la comunidad de promoción y prevención”, sostuvo.

Por su parte la subdirectora del efector, doctora Mónica González, hizo hincapié en que a lo largo del actual denominado periodo post-pandemia se observa un incremento de cuadros de ansiedad y depresión: “A lo largo de estos dos años y medio la gente tuvo muchas situaciones de pérdida, duelo, estrés postraumático que dejan sus secuelas las cuales estamos tratando. Por eso es tan importante poder trabajar en factores protectores, prevención y contención para dar respuestas a las necesidades reales de la población en este momento”.

“Cómo poder incorporar a la sociedad a los pacientes que atraviesan padecimientos psíquicos es fundamental, así como evitar los prejuicios que muchas veces llevan a la patología mental a lugares poco receptivos. Nuestra labor apunta a una comunidad más abierta y receptiva, donde el paciente ante la mas mínima situación de alerta en la vida diaria pueda sentirse en la confianza de consultar y de recibir tratamiento para evitar llegar a crisis o cronificaciones de trastornos mentales severos”, refirió González al tiempo que puntualizó los trastornos del sueño, de la alimentación, del rendimiento laboral y la concentración y de los estados anímicos deben ser tenidos en cuenta al momento de solicitar una consulta oportuna.

La coordinadora del servicio de Fibromialgia del hospital, licenciada María José Sepúlveda, comentó que hace aproximadamente 8 años un grupo de mujeres que padecen la enfermedad llegaron al efector solicitando ayuda. El espacio que se les ofreció se constituyó oficialmente en el actual servicio -conformado por reumatólogo, médico clínico, ginecólogo, endocrinólogo, rehabilitación, profesores de teatro, educación física y arte- por el cual ya pasaron alrededor de 5.000 pacientes.

“Las pacientes llegan con mucho deterioro físico y muscular, lo cual genera diferentes grados de discapacidad. Con estas actividades y la contención grupal se logra la reinserción social y laboral de las pacientes que realizan artesanías, talleres de canto, de lecto-escritura con tres libros publicados y actualmente a la venta que refieren a la temática del dolor y las adversidades que la enfermedad representa”, afirmó Sepúlveda, destacando que la comprensión y contención lleva a una mejor calidad de vida.

La actual jefa del servicio de Externación y Abordaje Comunitario de la institución, licenciada en psicología Gabriela Núñez, contó que la propuesta para esta actividad es “Vení y Armá tu Red”, en el sentido del armado de los espacios de apoyo para las pacientes una vez que salen de la internación, priorizando la necesidad de la continuidad en tratamiento, lo cual evita nuevas internaciones y descompensaciones.

“De la tarea de externación en sí misma, que venimos realizando desde 2008, pasamos a la del abordaje comunitario, donde nos encontramos con los distintos servicios de salud y efectores que hacen a la comunidad y espacios en general -desde escuelas a iglesias, barrios, vecindades, lugares donde hacen las compras- y con los cuales vamos articulando para identificar si el tratamiento puede tener continuidad en ellos, con equipos que puedan alojarlas”, dijo Núñez.

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