El hospital de niños realizó por primera vez una cirugía por síndrome de Moyamoya
Se trata de una intervención quirúrgica de revascularización indirecta que se realizó por primera vez en un paciente pediátrico en la provincia, quien fue operado por un equipo interdisciplinario del establecimiento y con un resultado exitoso. Esto le garantiza una buena calidad de vida.
La enfermedad de Moyamoya es un trastorno poco frecuente y progresivo de los vasos sanguíneos, por el cual la arteria carótida interna se estrecha, lo que reduce el flujo de sangre al cerebro. Se abren pequeños vasos sanguíneos en la base del cerebro para intentar suplir el déficit.
La palabra Moya-Moya deriva del japonés y quiere decir nube de humo, el término con el que se describe el aspecto de este grupo de pequeños vasos sanguíneos, los cuales son menos efectivos para llevar la sangre y el oxígeno necesarios al cerebro, por lo que se produce una lesión cerebral temporal o permanente y puede causar un accidente cerebrovascular (accidente isquémico transitorio), una dilatación en un vaso sanguíneo (aneurisma) o sangrado cerebral. También puede afectar el funcionamiento del cerebro y provocar discapacidad o retrasos cognitivos o de desarrollo.
“Lo que se pretende con la cirugía de la enfermedad de Moyamoya es llevar nuevamente irrigación sanguínea al cerebro, según la condición clínica del paciente o el grado de enfermedad. Existen muchas técnicas de revascularización. En el caso de este paciente, se discutieron las opciones en el servicio y se decidió realizar una revascularización indirecta, donde se prepara el terreno al cerebro para que se genere una vascularización nueva; nuevos vasos sanguíneos a partir de la carótida externa”, explicó el neurocirujano del hospital del Niño Jesús, doctor Federico Auad.
Además, el especialista agregó que se realizan múltiples orificios de trepano en el cráneo de un lado y del otro, a través de los cuales penetran vasos sanguíneos desde el periostio (membrana que recubre el hueso del cráneo) hacia el cerebro, ya que el paciente tenía una enfermedad avanzada y bilateral.