La tasa de Sífilis Congénita mostró un claro descenso

La Sífilis Congénita (SC) es una enfermedad severa que se transmite de una madre infectada al niño durante el desarrollo fetal o por el canal del parto durante el nacimiento. Es producida por una bacteria llamada Treponema Pallidum que afecta tanto a varones como a mujeres.

En Tucumán, los resultados anteriormente mencionados lograron evidenciarse gracias a implementación de diversas estrategias tendientes a reducir los riesgos tanto para el bebé como para las mismas madres. Entre ellas, se destacan: la captación precoz de la embarazada enferma, el adecuado control del embarazo, la consejería y tratamiento adecuado a la mamá positiva y su pareja, la provisión de servicios de diagnóstico y tratamiento temprano, entre otros.

Tal es así, que mediante un análisis de datos realizado por el Sistema Informático Perinatal de todas las maternidades que cubren el 95% de los partos del sector Público, se observó que un 80% y 90% de las mujeres se realizaron algún control prenatal. De éstas, entre un 60% y 70% tuvieron más de 5 controles, mientras que el 30% y 40% restante, se realizaron sólo el primer control antes de la semana 20 de gestación.

Frente a este escenario, Salud informa que las prácticas sexuales sin riesgo y la realización de un examen rutinario ayudan a evitar la Sífilis. Asimismo, se aconseja consultar con un especialista al manifestar síntomas dos o tres semanas después del contacto sexual. Éstos se caracterizan por: aparición de una pequeña llaga o úlcera en la boca, ano, vagina o pene (sin dolor); erupción o ronchas en el cuerpo, sobre todo en el tronco, palmas y planta del pie; lesiones en la boca; fiebre y aumento del tamaño de los ganglios, y/o caída de cabello.

Cabe destacar, que la Sífilis Congénita es una enfermedad que si es detectada y diagnosticada a tiempo, puede curarse.