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Nueva cirugía en el sistema público mejorará la calidad de vida de una niña de 5 años

La niña sufrió un accidente en el año 2014 que le provocó un traumatismo craneal. Durante esta mañana fue exitosamente intervenida por un equipo de profesionales locales y de Buenos Aires, que auguran para ella una mejor calidad de vida.

Era 27 de julio de 2014, Catalina Robles se encontraba con sus hermanos jugando en una hamaca en la plaza del Barrio 470 viviendas de San Andrés, cuando la estructura de la misma se desplomó cayendo sobre su cabeza.

Asociada a la grave lesión que este accidente le provocó, la niña sufrió una hidrocefalia y una fístula que relacionaba de forma anormal la cavidad craneana con la nasal. La cirugía que se practicó es un cierre de esa fístula a través de un abordaje por la nariz. Este procedimiento permite que se acorte el tiempo en quirófano y determina un post-operatorio más sencillo, asociado a los correspondientes controles posteriores.

Martín Fontana, médico del servicio de Otorrinolaringología del Hospital del Niño Jesús, comentó que el abordaje neuroquirúrgico que requería esta nena de 5 años de edad, comprendía una labor que un reconocido equipo de profesionales de Buenos Aires realiza con frecuencia, es por esto que se estableció contacto con ellos y gracias a la colaboración del Ministerio de Salud, del Hospital y de este equipo que tuvo la predisposición de venir a trabajar en forma conjunta, se pudo realizar la operación que fue todo un éxito.

“Ahora quedan por delante los controles post-quirúrgicos de la nena para evaluar que todo siga como corresponde. Ella sufrió un accidente y luego del mismo se sucedieron una serie de complicaciones, una de ellas es la fístula que ocasionaba la pérdida de líquido cefalorraquídeo a través de la fosa nasal, es esta la problemática que hoy se resuelve con la intervención que duró aproximadamente 1 hora y media”, explicó Fontana.

Ricardo Marengo es médico Especialista Universitario en Otorrinolaringología, se desempeña como Consultor de Cirugía de la Base de Cráneo en la Fundación FAVALORO y FLENI y es jefe de la Sección Otorrinolaringología y Audiología en CEMIC. “Vinimos a colaborar ad honorem con el equipo del Servicio de Otorrinolaringología, ya que la paciente quedó con fractura de base de cráneo de más de un año de evolución y en ese momento no se pudo resolver”, afirmó el profesional que encabezó la intervención.

En ese sentido, Marengo detalló que lo que practicaron hoy los 2 equipos médicos es un abordaje sin incisiones externas, ni en la cara, ni en el cuero cabelludo. “La cirugía mínimamente invasiva busca respetar las estructuras naturales, disminuyendo los riesgos respiratorios y de sufrimiento post-operatorio, sin generar cambios fisiológicos ni estético faciales”.

Cabe destacar que Catalina no solamente recibió esta cirugía, sino que el equipo de neurocirugía en forma combinada le colocó un catéter como una derivación o drenaje porque presentaba un cuadro de hidrocefalia. Este drenaje cumple la función de disminuir la presión sobre la zona del injerto.

El director del Hospital, Dr. Oscar Hilal, hizo hincapié en que esta cirugía le da una mejor calidad de vida a la niña, que ha hecho en varias oportunidades meningitis e infecciones de riesgo para su vida. “Además esto les permite a los cirujanos aprender una técnica quirúrgica novedosa aplicada por un médico tucumano que está radicado en Buenos Aires”, dijo Hilal. Al tiempo, destacó la total predisposición del Ministerio de Salud Pública, por medio del cual se consiguió el financiamiento para el traslado de los profesionales médicos y la paramédica que viajaron especialmente desde Buenos Aires.

“Esto nos ha permitido que la paciente no sufra el desarraigo del traslado para la cirugía y que la misma se haga en nuestra provincia, solucionando el problema por vía endoscópica que es mucho más fácil y de rápida evolución para la niña”, concluyó el director.

Esperanza para Catalina

José María Robles, papá de la paciente, explicó que el accidente derivó en múltiples complicaciones para la vida de su hija: “ella estuvo un mes internada en terapia intensiva, otro mes en terapia intermedia y luego 30 días en sala hasta que se recuperó. Catalina ingresó de emergencia y la gente del Hospital, especialmente la Dra. Marta Coroleu, salvaron su vida, por eso quiero agradecerles”.

Los doctores Ahuad y Fontana fueron también mencionados por Robles en sus agradecimientos y destacó el profesionalismo de los médicos que posibilitarán que su hija retome una vida normal. “Entre el jueves y el viernes de esta semana, se le colocará una válvula, esperamos que esta sea la última intervención por la que necesite atravesar”, sostuvo lleno de esperanza José María.

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