Personal del hospital de Monteros se capacitó en sistema de alto flujo
Enfermeros y kinesiólogos del efector asistieron el viernes pasado a un taller teórico-práctico donde aprendieron a usar la aparatología, su armado y desarmado, métodos de higiene y esterilización. Este tratamiento permite dar respuesta a niños menores de dos años con dificultades respiratorias.
Sobre esto, la jefa del servicio de Pediatría del hospital de Monteros, doctora Graciela del Valle Villarroel, dijo: “Se trata de un método que tenemos desde el 2017 para administrar oxígeno. Anticipándonos a la campaña de invierno donde empiezan todos los cuadros respiratorios, como la bronquiolitis, hicimos un taller con los enfermeros y kinesiólogos. Esto es muy importante porque primero logramos disminuir un 70 por ciento de las derivaciones, porque el alto flujo nos permite tratar aquí a los niños; y segundo, evitar que estos chicos entren en métodos ventilatorios más invasivos”.
Cuando el paciente llega al establecimiento es evaluado por los profesionales, si tiene menos de dos años de edad o pesa menos de 10 kilos y presenta una determinada dificultad respiratoria, entonces se realiza el tratamiento de alto flujo para proporcionar oxigeno no invasivo.
“Es una cánula nasal especial que administra una mezcla de aire y oxígeno, calentado y humidificado, acondicionada para este paciente con bronquiolitis. Eso permite que al niño con una dificultad respiratoria moderada lo podamos sostener en el hospital de Monteros hasta que el niño salga. Otras veces – las menos – tuvimos que derivar cuando el método no dio resultado. Pero este año tenemos una buena noticia, ya que el efector hizo refuerzo en una batería de traslado entonces tendremos menos problemas para las derivaciones”, comentó la referente.
Y agregó que los profesionales que participaron de la capacitación, tuvieron una gran empatía con el método. Además, a partir de hoy concurrirán al hospital del Este para observar cómo trabajan allí con el sistema, tomar lo positivo de este aprendizaje y llevarlo a Monteros.
“Es un método que se lo puede usar en salas comunes, en guardias o en hospitales de mayor complejidad, en la terapia. Es muy importante poder contar con esto en nuestra institución”, cerró.
