Una Terapia Intensiva de excelencia en su trato humanitario y terapéuticas
El servicio perteneciente al hospital pediátrico tucumano cumple un rol fundamental para la sociedad, asistir en la gravedad a todos los niños de la provincia y más allá de sus fronteras. Con recurso humano especializado y recursos materiales de última tecnología, busca salvar y dar mejor vida a sus pacientes.
“Hace 18 años que trabajo en la terapia intensiva. Somos una terapia que funciona con 16 camas para pacientes críticos, con riesgo de vida y que tienen distintos niveles de complejidad. Atendemos a pacientes muy complejos hasta aquellos que pueden tener una asistencia menos invasiva, pero necesitan un control estricto de su estado de salud, algunos postquirúrgicos, por ejemplo”, comienza relatando la doctora Florencia Jerez, médica de Terapia Intensiva del hospital.
El efector es centro de referencia en politraumatismos, es decir que recibe constantemente pacientes accidentados en pediatría. Para ello, cuenta con cierto nivel de complejidad, como la colocación de Catéteres de PICC; se adquirieron monitores nuevos para ese tipo de monitoreo de pacientes críticos con trauma severo de cráneo; se incorporó hace algunos años un encefalógrafo que permite ver toda la actividad cerebral de estos pacientes y llevar un control estricto de los mismos. Además, el personal está capacitándose en Doppler Transcraneal.
“Recibimos pacientes también de Santiago del Estero, Catamarca y en algunos casos de otros lados más lejanos como Jujuy. Ser terapista pediátrico no es una especialidad que se elige frecuentemente. Somos actualmente doce terapistas que estamos trabajando las 24 horas. Y todos somos especialistas en terapia intensiva específicamente pediátrica; lo cual nos pone a la cabeza de muchos otros centros. Es un grupo humano que se destaca poque trabaja muy bien en la contención familiar, de los mismos pacientes a medida que van saliendo. Estoy orgullosa de pertenecer aquí porque son profesionales que le ponen mucha energía a este trabajo que es muy difícil”, destacó la médica.
Si bien la terapia intensiva que llevan adelante tiene una modalidad cerrada (los pacientes están solos con el personal, salvo en horario de visita), la especialista explica que siempre tratan de que los papás estén informados. Si hay alguna novedad, se los llama telefónicamente para que acudan al efector.
“Somos un gran grupo entre los médicos y enfermeros, con una gran calidad humana. Los enfermeros son quienes mantienen cubiertas las necesidades de los chicos, desde la protección de los ojos hasta el cambio de pañales. Son excelentes personas, muy valoradas. Y también son muy pocos los enfermeros que eligen esta parte de especialidad. Todo nuestro trabajo lo hacemos con pasión y vocación”, cierra.